El Alzheimer una enfermedad progresiva. Se puede demorar o frenar el avance. Existen recursos que se puede utilizar: alimentación adecuada y la inclusión de deporte. Se ha conocido que pueden revenir un tercio de los casos de demencia en todo el mundo.
La alimentación adecuada es una de las herramientas más útiles para lograr un buen estado de salud. Está demostrado que es un factor determinante en los cuidados del cerebro y la salud del sistema cognitivo de las personas.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) sostuvo que se la considera como una epidemia debido a la velocidad con la que han aumentado los diagnósticos en los últimos años. Esta enfermedad es la forma más común de demencia. Hay de un 60 a un 70% de los casos reportados mundialmente.
Esta enfermedad es progresiva, hay pérdida de la memoria, deterioro de otras funciones cognitivas que son procesos mentales que nos permiten recibir, procesar y elaborar la información.
Un informe de la revista de salud Lancet encontró que ciertos factores en el estilo de vida podrían retrasar o prevenir un tercio de los casos de demencia en todo el mundo.
Uno de los factores que pueden ayudar en la prevención o en el retraso de esta enfermedad es la alimentación rica en verduras de horas verde, cereales integrales, pescado sobre todo los azules (caballa por ejemplo), aves sobre todo las orgánicas.
- Los investigadores resaltan la importancia de seguir una mezcla de dietas que sería la Mediterránea y la dieta DASH para el retraso neurodegenerativo. Ambas apuntan a lo natural, la elección de alimentos vegetales, como verduras, cereales integrales, frutas, legumbres, frutos secos, semillas, hierbas y especias, aceites vegetales fundamentalmente aceite de oliva. Inclusión de pescados sobre todo azules como la caballa, carnes sin grasa externa y aves de corral.
- La Dieta Dash además apunta a la reducción de la sal, de las carnes rojas, los dulces y las bebidas azucaradas. Y de bebidas alcohólicas.
Otro estudio centrado en casi 1.000 personas de edad avanzada encontró que esta dieta parecía reducir el riesgo de Alzheimer en un 35 % en aquellos que la siguieron moderadamente y en un 53% en las personas que lo siguieron más ampliamente.
¿Cuáles son los alimentos más peligrosos?
Cereales azucarados y dulces industriales:
Existe cierta relación entre el estómago y el cerebro que puede conducir al desarrollo de la enfermedad de Alzheimer. “La disminución de la diversidad intestinal y el aumento de la inflamación, se cree que tienen vínculos importantes con el desarrollo de la demencia de Alzheimer.
Los cereales azucarados, especialmente los no orgánicos, contienen glifosato, un pesticida común que se rocía en los cultivos de maíz. Se ha demostrado que produce una alteración en el microbioma intestinal.
Las bebidas azucaradas y dietéticos:
Las dietéticas con edulcorantes artificiales también alteran el intestino y disminuyen la flora intestinal saludable.
La estevia es el único edulcorante natural, pero no conviene incluir dulzor a las comidas ya que estimula posteriormente la necesidad de comer cosas dulces.
Además, una ingesta elevada de bebidas azucaradas y de alimentos industrializados aumenta la probabilidad de desarrollar diabetes tipo 2, que a su vez puede llevar al Alzheimer.
Exceso de carbohidratos:
Las personas que consumen en exceso alimentos con almidón, como pan, pasta y arroz común, también tienen un mayor riesgo de desarrollar la enfermedad de Alzheimer.
Una investigación centrada en personas mayores descubrió que aquellas que consumían más del 58% de sus calorías diarias en forma de carbohidratos tenían casi el doble de posibilidades de padecer deterioro mental leve y demencia.
Cuando los hidratos de carbono simples son procesados como es el caso del arroz blanco, pierden su fibra y otros nutrientes y sólo queda el almidón.
Aliméntate bien. Incluye actividades físicas placenteras a tu vida y no le tengas miedo a las enfermedades, haz el uso de todas las herramientas para que tu vida mejore y que logres estar en armonía.