¿Qué beneficios otorga la limpieza hepática? Previene y trata problemas del hígado. Para ello, es necesario en realizar periódicamente una limpieza hepática. Consiste en seguir una alimentación o dieta depurativa y un tratamiento natural que favorezca al hígado a eliminar sustancias nocivas que se acumulan en hígado y en vesícula biliar. Una limpieza hepática correcta puede mejorar nuestra salud, aliviar síntomas digestivos, aumentar la energía y vitalidad, fortalecer nuestro sistema inmunitario y prevenir enfermedades graves.
La limpieza del hígado y de los conductos biliares es una de las maneras más efectivas de revitalizar un metabolismo y de eliminar grasa del cuerpo debido a la mejoría substancial que esto causa en un sistema digestivo..
Muchas personas tienen los conductos biliares tapados con piedras compuestas de colesterol y bilis endurecida. La bilis es esencial para el metabolismo y la digestión correcta de las grasas y proteínas que consumimos. Cuando los conductos biliares se tapan con piedras, el metabolismo y la digestión se vuelven deficientes.
Las instrucciones de la limpieza del hígado son los siguientes:
Sal de Higuera (Epson Salts) | 4 cucharadas soperas |
Aceite de oliva extra virgen | ½ taza de té |
Jugo de naranja | 1 vaso de ¾ |
Vaso grande para la mezcla | 1 |
Jarra con tapa | 1 |
Comienza por ejemplo un sábado para hacer la limpieza ya que podrás descansar al próximo día.
Desde el día antes de la limpieza no tomes vitaminas, medicinas ni ninguna cosa que no sean alimentos regulares.
El día de la limpieza, desayuna sin ningún tipo de grasa (frutas, jugos de frutas) y un almuerzo de papa horneada u otro vegetal con sal solamente. Esto permite que el conducto biliar se llene de bilis y desarrolle una presión para empujar las piedras hacia afuera.
Este día, después de las 2:00 P.M., no comas ni tomes nada. Si rompes esta regla te puedes sentir muy mal al hacer la limpieza del hígado.
Prepara la sal de higuera (Epsom Salts) mezclando 4 cucharadas en 3 tazas de agua y echa esta mezcla en una jarra. Esta mezcla es suficiente para 4 porciones de ¾ de taza cada una. Coloca la jarra en la heladera para que se enfríe.
A las 6:00 p.m. bebe una porción (¾ de taza) de la mezcla de sal de higuera. Bebe agua después de ingerir la sal de higuera para quitarte el sabor de la boca.
A las 8:00 p.m. bebe otra porción (¾ de taza) de la mezcla de sal de higuera. No has comido desde las 2:00 P.M., pero no sentirás hambre. Prepara tu cama. En este proceso el factor tiempo es de suma importancia, no te adelante ni te atrases por más de 10 minutos mientras lo haces.
A las 9:45 p.m. vierte ½ taza de aceite de oliva virgen en la jarra. Exprime el jugo de naranja. Remueve con un tenedor. Debes tener ¾ de taza de jugo de naranja. Añade el jugo al aceite de oliva. Cierra la jarra y mezcla bien hasta que se unan estos dos ingredientes. Esto se consigue únicamente con jugo fresco.
A las 10:00 p.m. bebe la mezcla que has preparado de aceite de oliva y jugo de naranja. Tómalo estando parado de pie, y no tardes más de 5 minutos en ingerir por completo.
Acuéstate inmediatamente. Si no te acuestas inmediatamente pueden fallar en salir las piedras biliares. Mientras más rápido te acuestes más piedras lograrás sacar. Prepara tu cama con tiempo para que puedas acostarte sin tenerte que levantar para ir al baño ni ninguna otra situación. Tan pronto te hayas tomado esta mezcla acuérdate de estar boca arriba con la cabeza en la almohada. Trata de pensar en lo que estás pasando en el hígado. Trata de mantenerte perfectamente inmóvil por lo menos por 20 minutos. Quizás puedas sentir el rodar de las piedras biliares como si fueran canicas bajando por su conducto biliar. No hay dolor alguno porque los conductos biliares han sido bien abiertos por la sal de higuera. Ponete a dormir, puedes evitar el sacar más piedras si no lo haces.
Al próximo día. Al despertarte toma la tercera dosis de sal de higuera (¾ taza), nunca antes de las 6:00 A.M. Si tienes indigestión o náuseas espera hasta que se te vayan antes de tomar la sal de higuera. Puedes regresarte en la cama.
2 horas después. Toma la cuarta y última dosis de sal de higuera (¾ taza). Puedes regresar a la cama.
Después de 2 horas más. Puedes comer. Empieza con jugos de frutas y frutas. Durante este día trata de comer comidas fáciles de digerir. Para la noche te debes sentir recuperado.
¿Cuán bien le fue? Espere tener una diarrea en la mañana. Use una linterna para buscar las piedras que salieron en su inodoro. Busque las de color verde (color de la bilis) como prueba de que realmente salieron las piedras biliares. Las piedras biliares flotan porque están hechas de colesterol. Puede usted repetir esta limpieza intestinal a las 2 semanas y sacar aún más piedras de sus conductos biliares. ¡Hay personas que han reportado miles de piedras flotando en su inodoro!
Según la doctora Clark esta limpieza del hígado es totalmente segura. Se la han hecho personas de 80 años o más de edad sin sufrir complicación alguna.
Las personas que hacen esta limpieza pueden sentirse un poco mal por 2 o 3 días después de la limpieza, sobre todo cuando no hicieron la limpieza de hongos (candida albicans) antes de hacer la limpieza del hígado. Esto es un malestar temporal en lo que el cuerpo limpia los tóxicos que se desalojaron durante la limpieza.
Este proceso logra sacar las piedras sin cirugía.
Fuente: Frank Suarez