Ingredientes: (6 porciones)
Ricota descremada: 500 g
Ralladura de limón: 2 unidades
Jugo de limón: 2 unidades
Claras de huevo: 3 unidades
Gelatina sin sabor: 2 sobres
Edulcorante granulado: 4 cucharadas tipo postre
Jengibre: 1/2 cucharadita tipo té
Esencia de vainilla: 1 cucharadita tipo té
Limones para decorar
Preparación:
Tamizar la ricota y mezclarla con la ralladura de los limones. Disolver la gelatina sin sabor en el jugo de los dos limones y calentarla hasta que espume.
Retirar del fuego y dejar enfriar sin que gelifique.
Agregar a la ricota el edulcorante, el jengibre, la esencia de vainilla y la gelatina fría. Mezclar muy bien.
Batir las claras a punto de nieve y agregar la mitad del contenido a la ricota batiendo con fuerza.
Incorporar el resto con movimientos envolventes para airear la preparación.
Volcar la mezcla en un molde de torta desmontable mojado con agua fría y con la base forrada con papel de aluminio.
Refrigerar por espacio de 4 a 5 horas.
Desmoldar y decorar con rodajas de limones verdes en forma de moñitos.
Fuente: Las recetas Clásicas. Fundación Favaloro. Cocina Clásica Bajas Calorías. Año 1996.