ADITIVOS Y MIGRAÑAS.
Durante el secado industrial de las frutas, se añaden aditivos (conservantes) que son derivados del azufre (sulfitos). Esto es para que no se resequen en exceso.
Estos pueden provocar crisis de asma en individuos con alergias o personas hipersensibles.
Las frutas desecadas (higos, ciruelas, uvas pasas de uvas, la banana muy madura y la palta, contienen tiramina. Esta sustancia provoca constricción de los vasos sanguíneos, que puede ocasionar migraña en personas propensas.
Desde hace años se investiga para dilucidar las causas de la potencial asociación entre alergia alimentaria y migraña. Esto puede explicar que muchas personas con alergias asocien el malestar tras el consumo de frutas más problemáticas, como fresas, kiwi, durazno y damasco.
ADITIVOS Y URTICARIAS.
Hay aditivos que pueden causar urticaria, son los benzoatos, son conservantes y se distinguen con las siguientes denominaciones: ácido benzoico, benzoato sódico, benzoato potásico y benzoato cálcico.
Las personas sensibles a la aspirina, tienen más probabilidad de manifestar sensibilidad a los benzoatos dada la semejanza en la estructura química de ambos compuestos.
Frutillas y kiwis
Además de oxalatos, contienen salicilatos. Estos componentes causan muchas veces, a personas hipersensibles, reacciones alérgicas o urticaria y otros síntomas como irritabilidad, nerviosismo.
Las personas afectadas pueden manifestar también alergia al ácido acetilsalicílico. Los salicilatos son los conservantes naturales de las plantas, incluidas algunas frutas como las frutillas y el kiwi; verduras y hortalizas como los tomates, los champiñones y ají morrón rojo; y especias y hierbas aromáticas, como la menta o la lavanda.
FUENTE: CONSUMER