Estudios realizados por científicos internacionales han demostrado efectos beneficiosos del consumo moderado de cerveza para evitar la deshidratación del deportista y para la mujer en distintas etapas de su vida. Además, se ha determinado que su consumo moderado (no más de dos vasos de cerveza al día para hombres y una para mujeres) no tiene por qué repercutir en el sobrepeso ni el incremento del perímetro abdominal, la conocida como ‘barriga cervecera’.
Según un estudio en el que se han medido 150 parámetros, un consumo moderado de cerveza puede ayudar a recuperar el balance de líquidos tras la realización de ejercicio físico, puesto que el principal componente de la misma es agua (92%). Del resto, el 5% es alcohol y el tres por ciento otras “sustancias de interés” como sodio, potasio, vitaminas y moléculas antioxidantes.
Por su parte, Pérez ha destacado que la cerveza sin alcohol puede ser beneficiosa en la gestación por su presencia de vitamina B-9 (ácido fólico), esencial para el desarrollo del feto.
También ha calificado como “beneficioso” su consumo en la menopausia por los estrógenos vegetales que contiene y que pueden “aliviar las sensaciones” que se producen en la mujer en este periodo. Castillo también se ha remitido a estudios de otros colegas sobre la tercera bebida más consumida del mundo tras el agua y el te, y que lleva 10.000 años en la dieta humana, con lo que el organismo ya se ha acostumbrado a su consumo moderado.
Así, ha señalado que, según estos estudios, la cerveza reduce la mortalidad por todas las causas, sobre todo cardiovascular, favorece la recuperación del corazón dañado tras un infarto, y su consumo moderado parece tener efectos beneficiosos en el hueso.
Respecto a la obesidad y la ‘barriga cervecera’, el catedrático ha manifestado que los datos son “contradictorios” pues hay estudios que relacionan su consumo con la obesidad pero no específicamente abdominal y otros que no comprueban esta relación.
En todo caso, ha apuntado, el sobrepeso está asociado con un consumo “excesivo” de cerveza acompañado de la ingesta de otros alimentos de alto valor calórico, mientras que un consumo moderado no tiene relación con el sobrepeso. Incluso la Asociación para el Estudio de la Obesidad ha elaborado una guía con recomendaciones de tapas y pinchos para acompañar esta bebida.
Fuente: Eldiariomontanes.es