Breve historia:
- Los perros y los gatos pueden experimentar altos niveles de estrés al igual que nosotros.
- Muchos signos de estrés en las mascotas son raros para los seres humanos, por ejemplo: el aseo excesivo en los gatos y la caída excesiva de pelo en los perros.
- “Ojos de ballena” y bostezos en perros estresados.
- Los gatos que se sienten ansiosos a menudo se esconden, defecan fuera del arenero e incluso desarrollan inflamación de la vejiga.
Al igual que nosotros, nuestros perros y gatos pueden experimentar signos importantes de estrés. Dado que los miembros peludos de la familia no pueden decirnos cómo se sienten, depende de nosotros aprender a reconocer el lenguaje corporal y los comportamientos de una mascota estresada, para que podamos tomar medidas y corregir la situación.
10 signos raros de estrés en gatos y perros
1.Gatos que se asean todo el tiempo. El aseo excesivo en los gatos, también conocido como alopecia psicógena, ocurre cuando la lamida normal se vuelve obsesiva. A menudo comienza como un comportamiento de desplazamiento que es un mecanismo de afrontamiento ante el estrés. El lamer libera endorfinas que pueden ayudar a calmar a un gatito ansioso. Los síntomas de aseo excesivo incluyen lamer, morder, masticar, pérdida de cabello, heridas en la piel y ulceraciones.
Antes de diagnosticar la alopecia psicógena deben descartarse otras causas de lamidas excesivas, por ejemplo: picazón en el cuerpo, dolor en alguna parte del cuerpo, pulgas, parásitos y problemas neurológicos. Una vez que se descartan o se resuelven las causas subyacentes, el tratamiento para el aseo excesivo se centra en disminuir el estrés y mejorar el ambiente que lo rodea.
2.”Ojos de ballena” en perros. El ojo de ballena, también llamado ojo lateral, es la mirada de reojo que te da el perro y que comunica que algo está pasando. Ocurre cuando se ve una mayor cantidad de blanco en los ojos que es más pronunciada cuando inclina ligeramente la cabeza, pero al mismo tiempo mantiene los ojos fijos en algo o alguien.
Si el ojo lateral del perro está acompañado de una postura rígida o tensión visible, o si ocurre repetidamente y es más que una simple mirada de reojo, podría estar relacionado con el estrés y no estaría de más ponerse en contacto con un entrenador de perros o un conductista. Mientras tanto, cuando muestra el ojo lateral y otros signos de estrés, acariciarlo suavemente con movimientos largos y suaves lo ayudará a relajarse.
3.Gatos que se esconden. Si tu gatito que normalmente es social se esconde repentinamente y no hay una afección médica subyacente que cause dicho comportamiento, es probable que se deba al estrés. Desde ruidos fuertes hasta invitados desconocidos en el hogar, la lista de cosas que pueden estresar a tu gato es interminable. Para algunos, es ver la jaula para gatos, lo que indica la visita al veterinario. Mientras que para otros es el intento de cargarlos. Muchos gatos se estresan por otras mascotas en el hogar, fragancias, velas perfumadas y tormentas eléctricas.
Una buena idea es proporcionarle al gato un lugar seguro donde pueda estar cuando se sienta amenazado o ansioso. Cada gatito es diferente: a algunos les gusta estar debajo de la cama, mientras que a otros les gusta que los carguen. Los condominios verticales para gatos con escondites altos son ideales, mientras otros prefieren un espacio cubierto. Eliminar la contaminación eléctrica (enrutadores inalámbricos Wi-Fi) del entorno al gato, también puede ayudar, al igual que un tapete para hacer grounding.
4.Caída excesiva de pelo en perros. La caída excesiva de pelo en los perros puede relacionarse con estrés. Por lo general inicia con piel escamosa, que conduce a la caída del pelo. El perro que experimenta un ataque de estrés agudo tira pelo a los tres o cuatro días. Si esto perdura, podría haber algo más, incluyendo una progresión de estrés crónico, por lo que es una buena idea hacer una cita con el veterinario.
5.El gato no usa el arenero. El veterinario debe investigar un cambio repentino en los hábitos de baño de tu gato, para descartar un problema médico subyacente. Cuando esto se identifique y una vez que el gatito obtenga un diagnóstico sano, sería bueno indagar acerca del arenero, la ubicación, la arena o acerca de las interacciones entre los gatos, cuando hay varios en casa, pues esto puede ocasionar un cambio de hábitos en la dinámica del gato.
6.Perros bostezando. Cuando los humanos bostezan, significa fatiga. En los perros es más probable que sea un signo de estrés. De hecho, está en el lugar número 2 de los 10 signos más comunes de estrés en perros, justo después de lamerse la nariz o labios y antes de jadear.
7.Tu gato come poco o no come. Lo primero que debes tener en cuenta con un gato que no está comiendo es si ha ocurrido un cambio en su entorno o rutina. Para los gatos, el cambio equivale a estrés y un gatito estresado a menudo perderá el apetito.
Los eventos estresantes para un gato pueden incluir un nuevo miembro en el hogar, ya sea de dos o cuatro patas, fiestas o muchas visitas, la repentina ausencia de un miembro de la familia, gatos del vecindario que sean visibles para tu gato o que él pueda escuchar u oler, mudarse a una nueva casa, envejecer o un cambio en la rutina. A veces, algo tan simple como cambiar la ubicación del tazón de comida o la caja de arena, podría ocasionar estrés.
Si sospechas que hay un cambio detrás de la pérdida de apetito de tu gato, si te es posible, devuelve las cosas a la “normalidad” y ve si la situación mejora. Alterno a ello, de manera consistente conserva la “nueva normalidad” y dale unos días para que se ajuste. Los gatos necesitan comer al menos una vez al día, por lo que, si no comen nada o pasan más de dos días comiendo menos, debes llamar al veterinario.
8.Perros con orejas caídas y la cola metida. Los oídos de los seres humanos no cambian de posición y no tenemos colas, por lo que no se nos ocurre mirar estas extremidades en los perros para buscar signos de estrés. Sin embargo, las orejas que se jalan o que se clavan hacia atrás, y la cola baja o doblada, son dos de los indicadores más clásicos de estrés canino.
9.Cistitis intersticial felina (FIC, por sus siglas en inglés). La FIC (inflamación de la vejiga) es una afección compleja relacionada con el estrés. Dicho de otra manera, los gatos con FIC están estresados y los gatos así pueden comportarse como gatos enfermos y también pueden enfermarse. Los antibióticos a menudo se recetan innecesariamente para tratar la FIC, aunque, disminuir el estrés y mejorar el entorno deberían ser tu prioridad. Creo que subestimamos demasiado la cantidad de gatos con patología de aburrimiento que hay en todo el mundo.
Los pasos para ayudar a un gato con FIC incluyen construir un refugio en el hogar, por lo menos en una zona sin sustancias químicas, segura, tranquila y pacífica, además de participar en muchos juegos para aliviar el estrés durante todo el día y organizar visitas sin miedo al veterinario.
10.Perros con el pelo erizado o piloerección. Esta afección con nombre raro pasa cuando la respuesta de lucha o huida del perro se activa y libera epinefrina, lo que hace que los músculos se contraigan y el pelo se erice.
Fuente: Marcola