Diversos estudios demuestran que el consumo habitual de nueces disminuye la incidencia de enfermedades cardiovascular, del sistema nervioso, digestivo y reproductivo, diabetes, cáncer, enfermedades inflamatorias y, debido a su composición nutricional puede ayudar a mejorar el sueño y la memoria.
Beneficios:
- Contiene grasas saludables, específicamente, grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas. Estas grasas son claves para salvaguardar la salud cardiovascular, ya que pueden ayudar a reducir el colesterol. Pudiendo además servir de prevención frente a algunas enfermedades, como la diabetes o -incluso- el cáncer.
- Fuente de fibra; un nutriente crucial para mantener una buena digestión y controlar los niveles de azúcar en la sangre. Este beneficio puede ser especialmente útil para las personas que intentan perder peso, ya que la fibra puede ayudar a sentirse saciado, evitando el picoteo entre comidas, un hábito que puede dificultar la pérdida de peso.
- Alto contenido en de ácidos grasos Omega 3 de origen vegetal, que ha sido vinculado a menudo con menor adiposidad.
- Mejoran el sistema digestivo como el cardiovascular.
- Pueden potenciar la memoria.
- Favorecer el sueño. Esto se atribuye a su capacidad para estimular la producción de melatonina, la hormona que regula el sueño.
Aún sabiendo las propiedades beneficiosas que proveen estos frutos secos, es necesario si quieres adelgazar que tengas en cuenta de no abusar de su cantidad. Se recomienda no más de 30 a 40 g por día.
Es necesario para que podamos aprovechar sus beneficios nutricionales que sepamos cómo almacenarlas en tu hogar correctamente.
Es probable que guardes las nueces en un armario o despensa. Esto es un error, y se debe a su alto contenido de grasas no saturadas, que si las exponemos a la luz, al oxígeno y al calor en un armario pueden volverse rancias rápidamente. Lo más aconsejable es almacenar las nueces en un recipiente hermético y guardarlas en la heladera. Vas a prolongar la frescura de las nueces hasta cuatro meses, preservando no solamente su sabor, sino también sus valiosos nutrientes.
Si se deseas mantener las nueces por un período más extenso, de hasta un año, serán necesarias algunas precauciones adicionales. En tal caso:
- Envuelve las nueces en plástico.
- Colócalas en una bolsa hermética.
- Coloca una etiqueta correctamente y
- Guárdalas en el congelador.
Cuando decidas consumirlas, retíralas del congelador unas horas antes y déjalas para que alcancen la temperatura ambiente.
Pero el dejar tanto tiempo las nueces en el frízer hará que se pierdan nutrientes.
