Levadura de cerveza: 40 g
Leche descremada tibia: 1 pocillo café
Azúcar: 1 taza tipo té
Huevos: 2 unidades
Manteca: 70 g
Extracto de malta: 1 cucharadita tipo té
Ralladura de cáscara de limón: 1 cucharada sopera
Coñac: 2 cucharadas
Esencia de vainilla: 1 cucharadita tipo té
Harina 0000: 500 g
Sal: 1 pizca
Relleno:
Manteca: 50 g
Miel: 3 cucharadas tipo postre
Yema de huevo: 1 unidad
Cacao amargo: 4 cucharadas tipo postre
Nueces y almendras: 150 g
Preparación:
Diluir la levadura en la leche y dejar espumar.
Agregar batiendo y en forma alternada el azúcar, los huevos, la manteca a temperatura ambiente, el extracto, la ralladura, el coñac y la harina tamizada con la sal.
Amasar bien y dejar leudar en un bol tapado.
Colocar sobre la mesada, volver a amasar y dejar descansar tapado sobre la mesada durante 10 minutos.
Derretir sobre fuego la manteca con la miel, dejar entibiar y mezclar con la yema y el cacao.
Estirar la masa dándole forma rectangular y distribuir sobre ella la preparación, espolvorear con las frutas secas picadas.
Arrollar la masa y darle forma de espiral.
Acomodar en el savarín y dejar leudar nuevamente.
Introducir el savarín el la cacerola, tapar y cocinar a fuego mínimo hasta finalizar la cocción.
Utilizar: Cacerola antiadherente.
Esta preparación se puede incluir pero considera de consumir 1 porción chica.
Mientras tengas control de los volúmenes de las tentaciones dulces y saladas, puedes darte el gusto sin pensar que tu peso se va a ir hacia arriba.
Cuídate!!! Nadie lo puede hacer mejor que tu mismo.