Caminar puede ser un buen ejercicio si se hace correctamente, pues es de intensidad moderada y accesible a casi todas las personas, cualquiera sea su condición física inicial. Se puede hacer sin un equipo especial, solo o acompañado, todo el mundo sabe hacerlo, es seguro y no hay que trasladarse a un lugar específico para practicarlo.
Además, se puede introducir en la vida cotidiana sin alterar las costumbres ni hábitos de las personas.
Los beneficios de la caminata
Según la mayoría de los estudios, los beneficios corporales de realizar una caminata diaria de 30 minutos se traducen en beneficios cardiovasculares en cuanto a una menor frecuencia de infartos de miocardio, diabetes del adulto, accidentes cerebrovasculares e hipertensión arterial.
La actividad física moderada ha mostrado beneficios en:
- la osteoporosis.
- Artritis,
- Caídas en los ancianos, y también
- Efectos sobre el peso y los lípidos aunque más modestos.
- Es buena para la mente, ya que hay cierta evidencia de que el ejercicio moderado ayudaría en la depresión y en ciertos estados de ansiedad.
Para comenzar…
El período mínimo necesario para obtener efectos saludables es de 10 minutos diarios.
Según un estudio realizado en Buenos Aires, el 85 % de la gente entre 15 y 69 años camina por lo menos 10 minutos seguidos al menos 1 vez por semana.
Por esto mismo y siguiendo el consejo general de “algo es mejor que nada” y “más es mejor que poco”, se puede empezar por hacer períodos de 10 minutos cada día.
El ritmo debe ser mas rápido que el de caminar mirando vidrieras, con paso firme y regular, y que a la vez se pueda hablar sin que se corten las palabras.
Realizar 3 días de 10 minutos podría ser un objetivo inicial, aunque conviene saber que la mayoría de los estudios que mostraron beneficios fueron hechos con 30 minutos seguidos. No hay que olvidar hacer ejercicios de elongación en forma periódica.
Unas pocas semanas bastan para mejorar los aspectos circulatorios y reducir la resistencia a la insulina, a la vez que mejoran la tonicidad.
En tanto, para bajar de peso o mejorar el perfil de los lípidos se requieren algunos meses.
La conveniencia de beber líquido durante la caminata, depende del tiempo dedicado a la misma y de las condiciones climáticas.
En líneas generales hasta 30 minutos se podrían hacer sin necesidad de ingerir agua, salvo que se haga en pleno verano en las horas de mayor calor.
Un ejercicio para todas las edades
En principio no hay restricciones para ancianos ni enfermos, de hecho los cardiólogos recomiendan caminar a los pacientes coronarios o que hayan tenido by-pass.
OJO CON:
- Artrosis de cadera importante puede causar dolor intenso, puede hacer bicicleta fija.
- DBT, CARDÍACOS O ENFERMOS PULMONARES CONSULTAR ANTES DE CAMINAR.
- LESIONES AGUDAS (MIEMBROS INFERIORES)
- ARTRITIS DE RODILLA O HERNIA DISCO LUMBAR.
- PIE DIABÉTICO.
Hasta que esos problemas no se solucionen podría ser mejor cambiar a otro tipo de ejercicio.