Los cítricos limones naranjas o mandarinas, se cultivan en más de 100 países de clima tropical y subtropical. Este artículo te enseñará a elegirlos y a conservarlos adecuadamente.
¿Cómo almacenar los cítricos?
Los cítricos no son frutas tendientes a sufrir ataque de gérmenes patógenos, pero debe tenerse en cuenta ciertas pautas de conservación en casa para garantizar un almacenamiento adecuado y seguro.
Pero será necesario inicialmente considerar qué compramos.
Por eso, se debe elegir frutas con piel suave y firme y evitar golpes, ya que se podrían estropear si se guardaran algunos días.
En todos los casos, se debe elegir la fruta más pesada, este es un indicador de que están en su mejor momento y están llenas de jugo.
La piel de las mandarinas debe ser blanda, pero no arrugada, y bien adherida a los gajos. Una buena señal de calidad es el olor, más dulce e intenso cuanto más madura.
Las posibles manchas oscuras en los limones que puedan tener en la piel no afectan al gusto.
Para el almacenamiento hay que considerar estos aspectos:
La fruta debe estar fresca, no dañada. Es aconsejable no amontonarlas, colocarlas de manera que circule el aire entre ellas.
Guardarlas en sitos secos, frescos y aireados. Lejos de la humedad, el calor y de la luz solar.
Se deberá llevar a la heladera la fruta que se considere que no se consumirá en una semana.
Aquellas estropeadas, se deben separar del resto para que no estropeen al resto.
El color de los cítricos no se relaciona con su calidad. Este se debe a la presencia de carotenoides, que no tienen actividad microbiana, eso significa que no intervienen en el deterioro de la fruta.
El deterioro se asocia con factores como la humedad, la acidez (pH), la temperatura o los nutrientes (como la presencia de azúcar). Los cítricos son frutas ácidas, y no se ven afectada por bacterias sino por hongos.
¿Cómo extender la vida útil de los limones?
Expertos estadounidenses han realizado un estudio para conocer cuál es la mejor manera de almacenar durante más tiempo los limones. Han utilizado dos temperaturas distintas: temperatura ambiente y en la heladera. Los resultados arrojaron los siguientes resultados: los limones guardados a temperatura ambiente comienzan a endurecerse al cabo de una semana; los refrigerados, comienzan a perder humedad al cabo de una semana; y los conservados en la heladera en bolsas cerradas no se deshidratan hasta al cabo de unas cuatro semanas. Por tanto, para los especialistas de America Test Kitchen, la mejor manera de almacenar durante más tiempo los limones es en bolsas de plástico cerradas.
Aceites esenciales en los cítricos
Los cítricos naranja, limón o pomelo son alimentos ácidos. El jugo de la naranja posee un pH ácido que protege y ayuda a la conservación inhibiendo el crecimiento microbiano.
Los aceites en estos alimentos, se obtienen a partir de la presión del fruto para obtener la parte líquida.
Varios estudios demostraron que los jugos de las naranjas, tienen sustancias antimicrobianas que facilitan la conservación del producto si se mezclan con otros alimentos que también pueden impedir el crecimiento de la Salmonella por ejemplo.
¿Dónde se encuentran los aceites esenciales? En la piel de las frutas fundamentalmente, también en las hojas y flores del árbol.
Una investigación en la Universidad Miguel Hernández de Elche ya demostró que ciertas dosis de los extractos de mandarina, pomelo o naranja impedían el desarrollo de Aspergillus niger y Aspergillus flavus, dos de los principales hongos causantes de intoxicaciones en alimentos.