Si se reducen las calorías pero nos mantenemos inactivos, la pérdida de peso es menor o se estanca. Esto se debe a que el organismo disminuye el metabolismo para conservar la energía cuando se recorta el ingreso calórico.
Algunas técnicas para que el ejercicio sea parte de tu vida:
Elegir de dos a cuatro actividades que quemen calorías que uno disfrute e incorporar una por día.
- No intentar encontrar tiempo, tomarlo como con cualquier otra actividad.
- Identificar excusas habituales y desarrollar estrategias para sobreponerse.
- No elegir actividades de manera forzada, disfrutarlas.
- No es necesario quedarse sin aliento. El ejercicio más intenso es el menos eficaz para quemar grasas.
- Incrementar el nivel de actividad gradualmente.